En esta casa, nadie me ayuda

Hace un par de talleres atrás, me encontraba enseñando el paso a paso para organizar una vivienda. Éramos 15 mujeres, todas reunidas alrededor de una mesa y surgió debate.

Siempre surge debate en las mesas de mis talleres, pero esta vez sobre un tema que pasa en muchas casas y del cual nadie habla: ¿Qué pasa cuando queres ser organizado y tu familia no acompaña en la tarea?.

Desde ya te digo que, si esta es tu situación, no estás solo o sola… te entendemos, y no es un momento fácil. Parece como si la tarea de mantener el equilibrio estuviera siempre siendo boicoteada.

Una de las chicas contó su experiencia: Madre de 3 niñas, esposa, enfermera y ama de casa. Ella me comentaba que trabajaba en un hospital 6 horas por día todos los días. Después llegaba a casa y eso se convertía en otro trabajo sobre el cual ocuparse, entre las hijas de diferentes edades (15, 6 y 2) etapas totalmente diferentes de vida, demandas diferentes, intereses diferentes y un esposo muy compañero y trabajador pero con cero interés en mantener el orden en casa.

Es que claro, llega un momento en el que las prioridades van cambiando y creemos que vivir en orden es un tema secundario y es cuando surge la frase: “así no más está bien”

Pero que una sola persona se ocupe del orden de una casa donde habitan 5 es un poco estresante y agotador. ¿No te parece?

Hay algo que aprendemos en la carrera de coaching que se llama: PEDIDOS – OFERTAS – PROMESAS. A lo que le llamamos más fácilmente… las “POP”

Las POP nos permiten aprender a comunicarnos para pedir ayuda, generar un compromiso y obtener una recompensa o un evento a cambio.

Más sobre: En esta casa, nadie me ayuda

Es importante saber que hay que aprender a comunicar lo que necesitamos.

Esto puede que traiga diferentes comentarios al respecto y puntos de vista, como por ejemplo: “no puedo comunicar todo lo que quiero, se tienen que dar cuenta, si me ven que estoy haciendo algo se supone que saben que necesito ayuda

Esa fue la respuesta que me dijo la chica cuando le comenté lo mismo que a ustedes, y aquí va mi devolución:

El otro es otro, no ve las cosas como las vemos nosotros, no razona como razonaríamos nosotros, no se da cuenta de lo que nos daríamos cuenta nosotros, no siempre al menos, y el suponer que los demás se dan cuenta de una necesidad personal es un poco vago. Con esta bomba te digo: Hay que aprender a pedir ayuda o mejor dicho comunicar lo que nos gustaría que pase.
De todas formas te dejo algunos tips para no morir en el intento y para ir haciendo girar la rueda.

Armar un organigrama de la casa, donde cada uno tenga tareas específicas, con incentivos según las edades (dinero, chocolates, salidas, regalos, puntos, etc) y quehaceres. (especialmente con los niños)

Utilizar las POP: Ejemplo:

PEDIDO: Necesito que antes de salir de casa, tengas la cama hecha para que al volver puedas tener la mitad de la tarea de tu habitación resuelta.

OFERTA: (viene dada del otro lado): OK, pero si hago la cama quiero jugar más rato a la play.

PROMESA: Perfecto, si haces tu cama, antes de salir de casa y prolija yo te dejo jugar cada día ½ hora más.

Es un ejemplo muy superficial, pero entendiendo que no viene como orden, que a veces puede terminar resultando más tedioso, sino como pedido, y vamos generando en el otro un compromiso a cambio de una promesa. Que con el tiempo y el ejemplo diario se convertirá en un hábito constante que va a requerir un ajuste de ofertas y promesas.

3: Soltar la necesidad de que todo quede perfecto. Cada integrante lo hará a su manera, lo que necesitamos acá es no hacerlo todo sola, crear hábitos para la vida diaria y lograr más tiempo de ocio para cada uno.

El ingrediente secreto para cada uno de estos puntos es la paciencia que lleva adaptarse al cambio. Y a entender lo que a cada integrante le sirve y le sale bien, a que se haga costumbre sin la necesidad de estar chequeando minuto a minuto las tareas.

Deseo que vivan en sus casas desde la paz que se merecen para disfrutar de la vida y los momentos en familia.

Derechos de autor: Laura Ramayo

Organizadora Profesional y Coach Ontológico

lauraramayog@gmail.com

Fuente imagen: https://diariosanrafael.com.ar/

También te puede interesar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *