La gente tiene todo tipo de ideas acerca de lo es la Meditación. Por ejemplo, podemos pensar que la meditación nos llevará a explorar vidas pasadas, tener poderes de sanación o que nos transformaremos en personas maravillosas. Hoy: ¿Qué es la Meditación?.
Sin embargo, la meditación es un vehículo para ayudarnos a desarrollar serenidad y claridad, para aprender a entender nuestras propias vidas y vivir más armoniosamente en nuestro entorno.
Desde hace ya varias décadas la práctica de Meditación, en especial Mindfulness, es observada minuciosamente bajo el método científico y hoy es la práctica no farmacológica con más evidencia para reducir el estrés y la ansiedad.
Para meditar hay que tener en cuenta tanto la postura como el enfoque, estos elementos comprenden el punto de partida de la práctica y se aplican tanto al cuerpo como a la mente.
Asimismo la palabra “postura” se refiere tanto a la postura física como a la postura mental.
Igualmente la idea de enfoque involucra tanto al cuerpo como a la mente.
La postura física
Nos sentamos con el cuerpo erguido, ya sea con las piernas cruzadas sobre el suelo o un almohadón, arrodillados sobre banco de meditación, sentados en silla. También puede ser acostados en posición de savasana. Lo principal es encontrar una postura en la que podamos permanecer inmóviles el tiempo que dispusimos para la práctica.
Postura mental
Es la actitud con la que trabajamos nuestra mente. Inicialmente, podemos creer que es fácil hacer que la mente se desacelera y se pacifique, pero cuando empezamos el entrenamiento, encontramos que nuestra mente crea mil pensamientos, forma un sin fin de opiniones, recrea el pasado o planifica el futuro.
Más sobre: ¿Qué es la Meditación?.
Desde Mindfulness se proponen siete actitudes para trabajar la mente tanto durante la meditación propiamente dicha como para llevar a la práctica en la vida cotidiana.
Entre estas actitudes se encuentran la aceptación y el no juicio de lo que sucede en el momento presente,siendo el enfoque en el momento presente el objetivo central del entrenamiento de la Meditación Mindfulness .
Para este entrenamiento invitamos a la mente a enfocar su atención en un objeto como ser la respiración. Y cada vez que nuestra atención se aleja de la respiración por algún sonido o irritación, simplemente reconocemos que la atención ha divagando hacia otros pensamientos y con paciencia volvemos a enfocar en la respiración.
No importa cuantas veces nos dejemos llevar por nuestras reflexiones, el presente es un compañero fiel. Y aunque nos perdamos cien veces en nuestras rumiaciones, siempre estará allí para darnos de nuevo la bienvenida. Cada vez que nos sumimos en nuestros pensamientos siempre podemos despertar y volver al presente donde la vida toma lugar.
Derechos de autor: Verónica Gonzalez
Instructora Mindfulness Profesional
Instructora de Meditación.