Los niños tienen derecho a expresar sus emociones

En estos tiempos que estamos viviendo, nos damos cuenta que en muchos casos los niños nos están dando una enseñanza. Entienden bastante sobre lo que está pasando y hasta nos sorprender con algunas respuestas. Pero si bien vemos que los niños pueden tomarse esta situación como algo natural, es importante estar atentos a sus cambios de comportamiento.

Existen varias investigaciones realizadas que comprueban que los niños también transitan ansiedad como los adultos. La dificultad que se presenta es que en muchos casos no tiene desarrollada la habilidad para comunicarse abiertamente y decir con palabras concretas que les está pasando. Entonces, nos preguntamos cómo podemos darnos cuenta de lo que están sintiendo con esta nueva realidad.  Por eso, les dejamos algunos tips que nos parecen importantes para detectar que les está pasando:

  • Se encuentran mucho más sensibles  de lo habitual: Podemos ver que la emoción está a flor de piel y que muestran ciertos síntomas como  angustia o llanto frente a situaciones que no eran comunes antes de todo esto.
  • Pueden somatizar dolores que no saben bien distinguir cuál es la razón.
  • Requerir mayor atención por parte de los padres, sintiéndose más inseguros y teniendo algunas regresiones en ciertos casos. 
  • Pueden contestar mal cuando antes lo no hacían, presentando berrinches sin motivo alguno.

Frente a la aparición de estos comportamientos, es importante prestar atención como padres y/o abuelos sobre el impacto que puede tener esta pandemia en la mente de los niños.

Los niños confían en nuestro estado emocional, por lo cual es necesario ser coherente con nuestra emoción a la hora de hablar con ellos. El niño tiene que saber que no tiene porque reprimir lo que pasa, que puede darse el lugar de sentirse triste y que queremos que esa emoción y todos los pensamientos asociados a ella, sean compartidos con nosotros.  Tenemos que estar presentes para acompañarlos en este momento y transmitirles esperanza, hacerles saber que “todo esto también pasará y que pronto volveremos a salir y a realizar todas las actividades que estábamos haciendo”.

Para expresar sus emociones, es bueno darles la posibilidad de hacer un dibujo que les permita poder contar lo que están sintiendo para sentirse más aliviados.

Si algo malo pasará, los chicos también necesitan saberlo. Obviamente contándoselo acorde a su edad y con  las palabras que pueda tramitar, pero es importante saber que ocultar algo puede no ser el mejor remedio en este caso.

Es fundamental dedicarles tiempo dentro de lo posible, habilitar espacios de juego y compartir diferentes experiencias con ellos: leer cuentos, armar rompecabezas, construir legos, hacer dibujos. Todo esto ayuda a la psicomotricidad  fina del niño. También es importante darle el lugar para que juegue solo, eso estimula su creatividad y eso es muy positivo.

Las normas también son necesarias, quizás en menores medidas pero recuerden que los límites son estructurales en el desarrollo de la psiquis del niño.  El niño necesita saber que hay horarios, si bien pudo haberse modificado su rutina y ya no van al jardín o al colegio, es necesario que tenga su tiempo dedicado a ello.

No te culpes si no sos un superhéroe y sentís que no podes con todo esto. Es común tener esa sensación… estás haciendo lo posible y ya eso es suficiente en este contexto. Aprendamos a ser flexible con ellos es una competencias más que necesaria en este momento, transmitirles tranquilidad y no exponerlos tanto a los medios de comunicación, ya que la sobre información no es buena en este caso, aumenta la sensación de riesgo y eso conlleva a tener miedo o ansiedad.

Todo esto también pasará y vamos a ser mucho mejores después de este trauma social. Cuidemos a quienes queremos, mantengámonos comunicados y expresemos el amor que sentimos por todos aquellos que hoy tenemos lejos.  Si hay algo que nos dejará como enseñanza esta crisis,  es comprender el valor que tienen las relaciones humanas.

 Seamos amables y tolerantes con nosotros mismos, son los mejores remedios que podemos darle al alma en este contexto.

Antonella Gigli

Licenciada en Psicología y Coach Life

mariaantonellagigli@gmail.com

@licenciadagigli

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