Para tratar de manera holística e integral a nuestro paciente primero debemos conocerlo. En tiempos modernos de consultas de quince minutos y de fragmentación del ser humano en hiperespecialidades la relación médico paciente se ha visto deteriorada. Hoy: La práctica homeopática que honra la relación médico paciente.
Es prioridad comprender que el paciente no es un conjunto de órganos y sistemas. Quien se acerca a la consulta no es una enfermedad o padecimiento, es una persona que necesita ser escuchado.Una ley fundamental de la medicina es que “no hay enfermedades sino enfermos” ( Hipócrates).
Además de la enfermedad, síntomas y signos visibles, a los homeópatas nos importa saber que le está pasando a la persona en su cuerpo, mente y alma.
En consulta se hace un estudio detallado e individualizado de cada paciente. Por lo cual no se prescribe el mismo medicamento homeopático para las mismas enfermedades sino el que corresponden a cada forma de enfermar según los síntomas físicos, generales y emocionales que haya desarrollado.
Preguntaremos acerca de antecedentes familiares y personales de enfermedades. Estudiaremos minuciosamente los síntomas de consulta, en qué circunstancias aparecen, si cursa con brote y remisión, si se trata de un síntoma crónico, desde cuando lo presenta. Como también, cuando apareció por primera vez, con qué situación lo puede relacionar.
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Debemos conocer también aspectos caracterológicos, lo que llamamos síntomas generales. Por ejemplo, si es caluros, friolento, cuanto lo afecta el cambio de clima, si percibe que la energía (vitalidad) se modifica a lo largo del día, etc. Un aspecto fundamental y de alta jerarquía en el estudio de los síntomas homeopáticos son los llamados “trastornos por…”, es decir qué situación o circunstancias desencadenan o han desencadenado determinadas dolencias.
Los pacientes con recorrido en la homeopatía, que han logrado superar sus dolencias y continúan viniendo periódicamente a la consulta han comprendido que para estar sano hay que dedicarse tiempo para uno mismo, aprender a conocerse. Saber qué lo enferma o desequilibra forma parte del camino que ofrece la homeopatía, la introspección, el autoconocimiento. La homeopatía es tratamiento y prevención que no sería posible sin una comunicación fluida y el acompañamiento necesario para cada paciente.
Dra. Gisela Marchese
Médica ( UBA ) Homeópata ( AMHA)
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