¡Estoy aburrido! ¿Qué hago?
Es habitual encontrarnos con esta pregunta que realizan nuestros niños/as ya sea en la casa, en la escuela o en el consultorio. ¡Estoy aburrido!! ¿Qué hago?
Consideramos que si aparece en cada uno de estos tres ámbitos, es interesante escucharla y hacer juntos.
Desde Psiconfiar, consideramos que el aburrimiento es bueno para los niños y las niñas porque les brinda la posibilidad de decidir qué hacer con ese tiempo libre. Serían sus primeras elecciones posibles dentro de un marco contenido y de confianza como son los escenarios descritos: escuela. consultorio y casa.
Por tanto, es esencial que lo tengan tiempo libre y que aprendan a explorarlo sin miedos, ni culpa ni malestar.
En esos momentos, cada uno desde el lugar que ocupa, empezará a desarrollar recursos propios como la curiosidad, interés, la confianza y la creatividad.
Si está al aire libre mirará las formas de las nubes y les pondrá un nombre. Por ejemplo si está en el césped, recorrerá un camino de bichitos. Si está en el colegio, una vez terminado su trabajo, realizará un dibujo del cual se sorprenderá. Como si está en el consultorio, el profesional se interrogará por qué en ese momento dijo: ¿Me aburro?
Entónces si escuchamos: ¡Estoy aburrido!! ¿Qué hago?
Las familias en la actualidad, pos pandemia,fomentaron en sus hijos, las actividades extra escolares. Pareciera que sus hijos tendrían que recuperar todo lo que no hicieron en ese tiempo.
Acompañamos el movimiento, los deportes, las actividades artísticas y todo lo que nutra y enriquezca el desarrollo de la subjetividad en el niño.
Pero también resaltamos que los momentos de ocio son interesantes en cualquier etapa evolutiva: darse un tiempo para estar con uno mismo, disfrutando y viendo qué le pasa desde la experiencia individual.
Nos encontramos en la prxima nota! Gracias por leernos.
Lic. Andrea Grinberg
Psiconfiar
