El niño difícil

El niño difícil es aquel más revoltoso y ruidoso que los demás.

Es aquel que no acata fácilmente las normas sociales, que desobedece y contradice. Es ese niño que “nos hace perder la paciencia”, altera muchas veces la armonía familiar o el orden del aula escolar. 
No existen manuales. Hasta la experiencia con otros hijos muchas veces es fútil, porque lo primero a entender es que cada niño es único e irrepetible. 
Es importante poder despojarnos de culpas: el niño difícil no es consecuencia de una mala crianza, no es sinónimo de haber hecho algo erróneo como mapadres. 
Si desde el momento que traemos vida al mundo entendemos que somos nosotros los principales artífices de ese, su mundo, podremos visualizar el valor de edificarlo sobre cimientos que le den seguridad y confianza para poder SER libremente. 

Generalmente un niño difícil, tiene una emoción contenida que le cuesta expresar.

Muchas veces la manifiesta con desgano o enojo. El desafío está en ver cómo hacemos nosotros, adultos, para poder ayudarlo a poner en palabras aquello que siente. 
No nos enojemos, no lo aislemos..

Si el niño difícil nos pone muros, no agreguemos más cemento a los mismos. No sirve comparar.. somos seres distintos.

No sirve gritar.. la violencia sólo genera más violencia. No sirve amenazar.. no es el camino el miedo. No clasifiques, no lo etiquetes.. no le hagas cargar una mochila llena de adjetivos que no suman. 

Los ojos clasificadores son expertos en generar daños y perjuicios yendo sólo a sentencia en el interior del niño, indefenso de abogados que puedan defenderlo. 
El día que aceptemos que la crianza es vocación, pero también es trabajo que requiere tiempo y energía

El día que se contemple que necesidades de niños muchas veces no combinan con expectativas de adultos…

El día que como sociedad logremos entender que lo valioso está en las diferencias de sus miembros... Quizás ese día, el niño no sea tan difícil sea simplemente un niño y como todos necesite de amor, respeto y comprensión. 
Hay una frase que dice: "el mundo necesita gente que ame lo que hace" Ojalá podamos amar CRIAR. 

Estoy segura que ese día el mundo será un mejor lugar.

Dra. Sofia Rittatore

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