¿Qué es la crianza respetuosa? El principio básico de la crianza respetuosa es considerar al bebé o niño como una persona, un ser humano que tiene necesidades, no solo fisiológicas (alimento, abrigo, higiene) sino también psicológicas, sociales y afectuosas. Realizar una crianza respetuosa es entender que el niño no es caprichoso sino que tiene necesidades propias de su edad y de su medioambiente y nosotros, adultos en que la criatura ha depositado el 100% de su confianza somos responsables de reconocer y satisfacer sus necesidades.
Elegir una crianza respetuosa es entregarse a una vida niño-céntrica y no a la clásica convivencia adultocéntrica que exige que el niño se adapte a nuestra vida y necesidades. Centrándonos en el niño, necesitaremos entender lo que le pasa según su edad, acompañarlo, aconsejarlo y guiarlo. Debemos entender que como todo ser humano busca satisfacer sus necesidades y busca encontrar placer en las actividades que realice. No debería asombrarnos que al preguntar a un niño por qué hace una cosa nos responda simplemente ‘porque me gusta’; los adultos actuamos por esos mismos móviles y es aceptable también en ellos.
La crianza respetuosa va de la mano de la crianza con apego y la crianza fisiológica aunque no son lo mismo. Van de la mano con el apego porque los niños necesitan brazos y mimos y atención permanente. Van de la mano con la crianza fisiológica porque un niño atendido respetuosamente a sus necesidades sin imposiciones innecesarias demandará estrictamente las atenciones fisiológicas que necesite para su etapa.
–Centrarme en sus necesidades más que en mis deseos
-Respetar sus tiempos y adecuarme a sus etapas
-Lactancia a libre demanda y destete fisiológico
-Colecho
Hay tantas voces con este tema, tanto fanatismo, como tantas criticas.
Tantos artículos para leer, muchos debates en medios, miles de posteos en redes sociales, imágenes, frases que nos explican un poco mas de que se trata.
Creo que todo evoluciona, todo crece, se sabe de mas cosas, se prueban nuevos métodos, se conoce mas, se toman otros y nuevos criterios a la hora de pensar en la crianza de nuestros hijos.
También es cierto que criar de esta manera, requiere principalmente de un acuerdo entre los padres, de un deseo de ambos de que así sea, de una convicción de seguir estos modelos, y de tiempo, porque algunas cuestiones demandan mas dedicación.
Cada familia tiene derecho a elegir el modelo de crianza que considere mejor para su hijo, siempre en base al amor y al respeto, cuidando y protegiendo los derechos de el como niño, como persona.
Pero como padres resulta interesante conocer, escuchar, y aprender que existen nuevas corrientes, luego podemos adoptarlas en parte, tomar algo de ellas si nos sirve, tomar el todo u optar por pensar o sentir que nuestra crianza deseamos vaya por otro lado. Todo es valido, mientras se priorice lo que consideremos mejor para nuestros niños.
