El comienzo del jardín implica un cambio muy significativo en la vida de cada niño o niña y según sea su edad
Su temperamento, el manejo de la situación, el jardín elegido (si es conocido o nuevo).
Su adaptación a este espacio se dará de una u otra manera.
Hay que comenzar entendiendo que el comienzo del jardín implica un gran cambio en la vida del niño.
Desde edades muy tempranas el bebé se adapta a rutinas familiares, a ser cuidado y contenido.
Atendido en sus necesidades básicas y de afecto por sus figuras de apego principales.
Por mas pequeño que sea este cambio en el espacio, en los adultos y en la lejanía de sus cuidadores principales
Representa un cambio y el bebé se da cuenta de esto sea cual sea la edad.
Aclaro esto porque es necesario preparar al bebé para estos cambios venideros.
Y cuanto mas sea esta preparación sin duda ayudará a que su adaptación al nuevo espacio.
A las nuevas rutinas y a los nuevos adultos se desarrolle más favorablemente.
¿Hay una receta? No, no la hay.
El comienzo de jardín implica una separación que cuanto mas pequeño sea el niño o niña puede generar esto, mayor angustia. Hay un cambio en el pensamiento infantil muy importante que es la permanencia del objeto.
Quiere decir que comienza a entender, entre otras cosas, que aquello que no está a su alcance o a su vista.
Sigue estando aunque no lo vea.
Esta tan valiosa adquisición que se da alrededor del año y medio favorece al entender que mamá no ha desaparecido.
Cuando un niño no se adapta es importante que como mapadres veamos qué le estamos transmitiendo. Hay una fusión entre el bebé y sus mapadres, que va mas allá de las palabras.
Por eso cuanto mas seguros se sientan los mapadres de la decisión, del lugar elegido, de las horas.
Y de confiar en dejarlo al cuidado de otras manos, mejor se dará este proceso de separación.
Puede haber angustia, esto es un cambio y los cambios a todos nos generan incertidumbre y angustia.
Lo que no debe aparecer es sufrimiento.
Si esto aparece, hay que rever las condiciones en las que este proceso se va dando.
Y entre la es cual ay la familia volver a empezar planteando nuevas pautas y estrategias.
También es cierto que hay niños y niñas que se adaptan mas fácilmente a los cambios y que los procesos los viven de otra manera.
Puede pasar que se adapte perfecto al jardín pero a la noche quiera volver a dormir en la cama de los mapadres.
Es esperable ya que insisto está muy bien que se manifiesten los cambios , el tema es cuán sostenido en el tiempo duran estas conductas.
Todo cambio necesita tiempo
Todo cambio necesita acomodarse y esto genera una incomodidad o angustia inicial que tanto niños /as como padres deben transitar.
El jardín, es un lugar de encuentro con los otros
Es el lugar donde cada niños/as se enfrenta con el desafío de resolver las situaciones con sus herramientas,
Comenzar a desplegar sus alas desde chiquitos. Es encontrar amigos y es juego.
Tiempo, acompañamiento, proceso, seguridad, confianza, escucha, mirada y afecto.
Palabras claves para este proceso que NO es solo del niño que comienza el jardín sino de toda la familia.
María Laura Alonso
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Fuente imagen: Web consultas
