El “movimiento libre” es propuesto por Emmi Pikler, médica pediatra, fundó y dirigió una casa cuna, Instituto Loczy en Budapest, donde realizó observaciones de los niños y niñas que vivían allí.
Apuntaba a que tuvieran una vida estable con cuidados amorosos y personalizados, un entorno que se adapte a las funciones por edades y ponía especial atención a la libertad de movimientos. Sus investigaciones a partir de su metodología comprobaron en ellos una buena adaptación familiar, social y profesional.
La doctora Pikler habla del movimiento libre como un sistema educativo que favorece la autonomía de los niños y niñas orientándose a movimientos más armoniosos. Infundiendo importancia a la posibilidad de dejarlos libres para resolver sus “conflictos” por sí mismos. Destaca que no se los coloque en posiciones en las cuales no hayan llegado por sí mismos. Pone énfasis en confiar en la capacidad innata que cada niño y niña tienen logrando llegar a nuevas posturas, cada uno a su propio ritmo. Ofreciéndoles además, un espacio adecuado, muebles y juguetes acordes a la edad.
Lo que hay que tener en cuenta, es saber que el desarrollo motor se rige por una ley de maduración del sistema nervioso. La misma se refiere al tiempo en que se van desarrollando las partes del cuerpo. Corresponde de esta manera a cefalocaudal, es decir, lo que primero comienza a madurar son los músculos de la cabeza, observándose en la posición erguida de la cabeza, siguiendo como una línea imaginaria hacia los pies, lo que permite luego mantenerse sentado, posteriormente erguido y más adelante darle lugar a la aparición de la marcha.
Al mismo tiempo, la otra ley de desarrollo es la próximo distal, la maduración va desde el centro del cuerpo hacia las extremidades. Puede observarse en los bebés con sus movimientos globales, que luego a medida que pasan los meses se van perfeccionando siendo voluntarios, apareciendo la motricidad fina en las manos.
Creo fundamental mencionar lo anterior para dar cuenta que el desarrollo motor va a depender de su sistema nervioso, por lo tanto no es necesario forzar posturas. Afirmando de esta manera que las mismas, las cuales los peques logren por sí mismos, se encuentran mejor consolidadas, porque ellos mismos van probando y ensayando con su cuerpo.
Me parece interesante también que los padres, madres o cuidadores tengan conocimiento de los hitos del desarrollo, para saber que es lo esperable, no frustrarse ni ellos ni los peques. Si bien existe un tiempo esperable para cada adquisición motora, cada niño y cada niña tienen su propio tiempo.
Y nosotros como adultos ¿no tenemos que hacer nada?
Por el contrario, es muy necesario el rol del adulto. El bebé necesita que su figura de apego este presente, que lo acompañe con amorosidad, respeto, que intervenga sólo en caso de ser necesario.
Además debe brindarle un espacio amplio dentro de sus posibilidades, un suelo firme y seguro. Presentarle juguetes que sean acordes a su edad, fáciles de manipular, estructuras que inviten a reptar, treparse. Se aconseja ropa cómoda para facilitar sus movimientos. Pies descalzos para explorar y percibir con ellos.
Es importante hablarles permanentemente, anticipar y pedirles permiso cada vez que toquemos su cuerpo. Explicarles cuando llegan a cierta posición que es lo que hicieron y felicitarlos por sus logros.
Al mismo modo que el movimiento libre, se recomienda el juego libre, el juego espontáneo. Se trata de ofrecerles materiales seguros y acordes a su edad, para que puedan explorarlo por sí mismos, que aprendan a manipularlos y sacar sus propias conclusiones de los objetos. Esto favorece altamente el área cognitiva, la imaginación y creatividad.
Para terminar este artículo quiero regalarles esta frase:
“Es esencial que el niño descubra por sí mismo. Si le ayudamos a resolver todas sus tareas, le quitamos la más importante para su desarrollo mental. El niño que consigue algo por medio de experimentos autónomos adquiere conocimientos completamente distintos de los que adquiere un niño al se le ofrece precisamente una solución” Emmi Pikler
Fiorella Natale
Técnica Superior en psicomotricidad
Especialista en primera infancia
@talleresdepmt
tallerespsicomotricidadpmt.gmail.com
