Exterogestación: el puerperio del recién nacido


Un bebé  desarrolla su cerebro mayormente fuera del útero. Esto hace que necesite ciertas condiciones muy parecidas a las que tenía para terminar de desarrollarse.

De este modo podemos apreciar que el bebé no está preparado para salir al mundo en el momento del nacimiento. Un bebé humano no se parece a un recién nacido de otros animales,desde la psicología se ha estudiado que a los 18 meses de edad, el infante puede sentir una especie de independencia basada en una imagen prematura de integridad.

Durante esos primeros 18 meses, los bebés esperan y necesitan «un útero externo» exterogestación.

El recién nacido no puede autorregularse y necesita que los cuidadores capaciten su sistema para que lo haga (por ejemplo, calmándolo rápidamente para que el sistema aprenda a hacer de eso la «norma»).

Los huesos de la cabeza de un bebé no se fusionan hasta alrededor de los 18 meses para permitir el gran crecimiento cerebral, lo cual se produce a partir de los componentes de cuidado del nido evolutivo de calmar, abrazar, acariciar, acunar, amamantar, portear.

Sin embargo,muchas veces no se parece estar al tanto de las necesidades de los bebés, comenzando con muchos profesionales médicos que los  tratan con cierto desapego(dejar llorar, no permitir el contacto piel con piel inmediato al nacimiento, etc) como si ello no fuese a registrarse en sus psiquis prematuras ¿Qué deberían saber los profesionales y todos nosotros? Deberíamos comprender que el desapego daña sus sistemas inmaduros que aún están en desarrollo: neuroendocrino, inmune, neurotransmisor, respuesta al estrés, y todos ellos pueden verse afectados durante toda la vida.

Debemos atender especialmente las necesidades de los bebés durante los primeros 1000 días de vida.

Ya lo sabemos: los bebés necesitan cuidados parecidos a los que tienen dentro del útero durante 18 meses después de su nacimiento. Deben mantenerse tranquilos y reconfortados mientras que sus sistemas neurobiológicos están madurando sus funciones.

Después de los 18 meses, el desarrollo sensible de los niños dura aproximadamente hasta los 3 años (primeros mil días), aunque el cerebro seguirá creciendo hasta los 6 años.

Un niño pequeño es un sistema dinámico cuya personalidad y salud se construyen socialmente por cuidadores, «ladrillo por ladrillo»caricia sobre caricia, palabra a palabra.

No deberíamos angustiar a los niños (especialmente de forma rutinaria, intensa o prolongada), especialmente en los primeros 3 años, sino apoyar amablemente el desarrollo de la autorregulación.

Comprender y practicar una buena atención temprana asegurará el desarrollo adecuado de todos los sistemas (neurobiológicos y sociales) y el florecimiento de una psique sana, única, amada y respetada.

Para cambiar el mundo primero debemos cambiar la forma de nacer… Y Criar.

Maria Laura Barrera / Rocío Maidana Ávila

Doulas – Preparadoras Prenatal -Asesoras en Lactancia Materna

rmaidana.92@gmail.com   / mlaurabarreramb@gmail.com

@gestando.maternidades

www.gestandomaternidades.com

Fuente imagen: www.bioguia.com

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