El contacto nutritivo es una forma de comunicación a través del cual se genera un puente de amor y respeto en contacto piel a piel entre mamá, papá, cuidadores.
Comienza en el vientre materno con las caricias, los cantos, las palabras dedicadas, la música, es un trato amoroso y de sostén con ese bebé.
Este contacto facilitará la conexión con ese ser único, ese niño/a tendrá las necesidades cubiertas, se le muestra que se lo valida, se lo nombra, hay presencia, hay vínculo, y se de esta forma se irá fomentando el apego.
Es un vínculo que relaja, alivia, nutre, libera, da placer a quien lo da y a quien lo recibe.
Hacemos contacto nutritivo con los mimos, los abrazos, con juegos de amor, con las miradas, las sonrisas, los cuentos y los cantos.
Los nutrientes emocionales indispensables para llevar una sana autoestima serán: sentirnos amados, respetados, incluidos, comprendidos, escuchados, aceptados, importantes para otros.
Sentirnos acariciados física y emocionalmente, con respeto, con amor, aceptación y reconocimiento brindará confianza , reducirá el estrés, y liberara tensiones.
Estos nutrientes serán constructores y cada individuo tendrá una relación distinta de acuerdo a lo nutricio de su historia y de sus vivencias.
Eliana D. Waichman
Psicopedagoga
Orientadora en crianza
Orientación vocacional educacional
IG @crianzaenronda
Elianawaichman@gmail
Fuente Imagen: Vía País