Derechos del consultante

Lo qué tenes que saber del espacio terapéutico. En esta nota: Todos los derechos del consultante.

“Qué es eso?” Me dijo una consultante cuando en la primera sesion le ofrecí el consentimiento informado.

“Nunca firmé nada, ¿Por qué ahora, es nuevo?” Me comentaba un padre al sociabilizarle el encuadre del tratamiento.

“Yo no entiendo nada de esto” Me decía una madre cuando explicaba el modelo ABC de las terapias conductuales y como actuaba en su hijo

“vos que haces entonces?” ¿Cuál es la diferencia” Me preguntaba una consultante adulta sobre mi enfoque terapéutico

Así mismo, me miraban sorprendidos una madre y padre, cuando comentaba que había vuelto a revisar su historia clínica y explicaba el cambio que haría hacia intervenciones más conductuales con su pequeño

Es alarmante el número de consultantes y pacientes que han asistido por primera vez al espacio terapéutico y desconocían por completo todos sus derechos.

No les voy a negar que en primera instancia me produce un malestar significativo ya que no puedo creer. Es por eso que deseo que todos conozcan sus derechos, no solo mis pacientes.

Si vas a iniciar un espacio terapéutico tenes que saber que:

Tenes derecho a conocer, observar y aceptar o no los términos. Como así las condiciones del tratamiento, el encuadre, el cual suele dejarse asentado en un consentimeinto informado.

También, tenés derecho a conocer el marco teórico con el que trabaja tu terapeuta o la de tu hijo.

Tenés derecho a recibir a a partir de una instancia de evaluación y conceptualizacion, un diagnóstico que explique tu sintomatología actual

Por otor lado, tenés derecho a recibir un tratamiento con evidencia científica. Y el más efectivo que se haya comprobado hasta el momento que lo es para tu diagnostico/problemática

Tenes derecho a solicitar la historia clínica tuya o de tu hijo cuando lo desees

Tenes derecho a interrumpir el tratamiento, por el motivo que fuere, cuando lo desees.