En estos tiempos de tanta invención de juegos y actividades con la niñez, les propongo jugar con sombras.
Podemos jugar a copiar, dibujar, contornear, inventar con luces, sombras, formas. Podemos agregar bloques, hojas de árboles, animales de madera, juguetes, muñecos, etc
Diferenciar sombras negras y reflejos de colores. Hablar de la contraluz, de cuando en un objeto podemos observar su sombra y cuando no.
Observar el cambio del sol y conversar sobre sus aspectos, repasar el contorno.
Identificar las fuentes de luz y distinguir entre las zonas de sol y de sombra
Observar y explorar los cambios que se producen con las sombras a lo largo del día (las sombras de primera y última hora son más alargadas y al mediodía más cortas).
El sol se mueve a lo largo del día. La luz se refleja en distintas superficies. También podemos hacerlo en un dormitorio oscurecido y una linterna por detrás del objeto o la persona. Podemos jugar a hacer sombras chicas en una pared a modo de animales u objetos.
Saber formular preguntas y crear hipótesis despierta en los niños/as la curiosidad y el interés por el fenómeno/objeto estudiado, que lo llevará, posteriormente, a buscar respuestas, crear nuevas conexiones y adquirir nuevos aprendizajes. De esta manera estamos comenzando a incorporar cocenptos del método científico generando hipotesis y comprobandolas o no.
¿Qué objeto o persona hace sombra y cuando?
¿Cómo se forman las sombras?¿De dónde?¿Cómo podemos hacerlas?
¿Dónde está la sombra por la noche?
¿Nosotros/as podemos tener sombra?
¿Se puede romper?
¿La sombra come?, ¿la sombra duerme?
Animémosnos a jugar, explorar, experimentar y probar.
Eliana waichman
Psicopedagoga
Coordinadora pedagógica infantil
Orientadora familiar en temas de crianza.
@crianzaenronda