Se podría decir que lo más difícil es poder aceptar que un hijo tiene alguna dificultad.
Al concebir un hijo, pasar un buen embarazo y luego tenerlo en brazos y ver que está todo bien es lo que todos los padres anhelan.
Cuando comienzan a pasar los meses y las consultas al pediatra son buenas, solo indicaciones de como hay que seguir… los padres sienten una gran alegría y es como que todo funciona muy bien!
Pero resulta que a veces…. Con el correr del tiempo….llegando a los 9 o 12 meses hay ciertas pautas evolutivas que no comienzan a darse.
Comienzan las dudas, las averiguaciones…la angustia…
El camino es arduo e incierto. Comienzan las consultas y no siempre aparece un diagnóstico claro…
Por supuesto que es mejor que no aparezca nada neurológico!! Todos deseamos eso!!
El camino de la estimulación y el acompañamiento a padres es lo más importante en este momento.
Alguien con quien hablar de los sentimientos que aparecen, la manera de acompañar a nuestro hijo y encontrar el camino a la estimulación adecuada en el momento adecuado.
Es más importante que nunca armarse de una red de sostén para transitar esas dificultades, hacerle frente y trabajar para ayudar lo mejor posible. Sin culpas, con la fuerza para afrontar lo que viene y con el amor que se necesita para salir adelante.
Claudia Zaid
Lic. en Psicomotricidad
Especialista en Vínculo Temprano
Grupos de Crianza
@crianza_claudia_zaid
Fuente imagen: Ser Padres