Embarazo y Alimentación basada en plantas

El embarazo es un momento biológico especial, de vulnerabilidad nutricional en la mujer, donde los requerimientos nutricionales se encuentran aumentados. Por este motivo la nutrición durante este período es de vital importancia no sólo para garantizar un adecuado crecimiento fetal y evitar complicaciones y estados de morbilidad materno-fetales en etapas posteriores del ciclo vital, sino también para asegurar un correcto estado nutricional de la madre y favorecer la lactancia .

En los últimos años ha crecido la popularidad de la alimentación vegetariana fundamentada en consideraciones éticas, cuestiones medioambientales, factores religiosos y razones de salud . Esta popularidad y difusión de las dietas veganas-vegetarianas en poblaciones sanas pone en relieve la necesidad de reunir más datos sobre su grado de seguridad durante el embarazo y así dejar en claro los riesgos y beneficios de estas opciones de alimentación.

Una alimentación basada en plantas, es aquella que se caracteriza por la no ingesta de alimentos de origen animal como carne vacuna, aves, pescados, así como de aquellos productos que puedan contenerlos.

Existen tres tipos de alimentaciones basadas en plantas o vegetarianas:

1. Lacto-ovo-vegetariana. Las personas que optan por este tipo de dieta consumen cereales, verdura, fruta, legumbres, lácteos y huevos, pero ningún tipo de carnes.

2. Lacto-vegetariana. Excluyen las carnes y los huevos.

3. Vegana. Es la más estricta. En este tipo de alimentación no se ingiere ningún alimento de origen animal.

Las dos variantes más frecuentes son la lacto-ovo-vegetariana y la vegana, aunque últimamente se están identificando con otro tipo de dietas vegetarianas o casi vegetarianas, como las dietas macrobióticas, que se basan principalmente en el consumo de cereales, legumbres y verduras y, en menor medida, frutas, frutos secos y semillas.

A través de diferentes estudios a nivel mundial comparando esta clase de alimentación con una tradicional que incluyen productos de origen animal, se puede comprobar que  una alimentación basada en plantas puede ser equilibrada y bien planificada puede tener beneficios para la salud (niveles más bajos de colesterol, menor riesgo de cardiopatías, hipertensión y diabetes tipo 2, etc.), pero requiere de suplementación medicamentosa de algunas vitaminas y/o minerales en la mayor parte de los casos para que resulte completa en nutrientes.

¿Cuáles son los nutrientes fundamentales durante el embarazo que debe cubrir una alimentación basada en plantas?

Durante esta etapa, se debe aumentar ligeramente la ingesta de energía, pero esto no significa que nada se debe “comer por dos” como antes se pensaba. Además, se requerirá un incremento de proteínas, minerales (hierro, calcio, zinc, yodo y magnesio) y vitaminas (ácido fólico, vitamina C y vitamina D) y ácidos grasos esenciales (DHA) con el fin de conseguir un desarrollo fetal óptimo. En esta clase de alimentaciones es fundamental la suplementación con vitamina B12 ya que esta vitamina reviste una importancia fundamental en el desarrollo neurológico del futuro bebé.

Cabe destacar que este tipo de suplementación debe continuarse durante la lactancia como se comenzó durante el período de gestación.

Las investigaciones de los últimos años conducen a concluir de que, si una alimentación basada en plantas es debidamente planificada y llevada a cabo con asesoramiento profesional para suplementar los nutrientes considerados críticos en el embarazo, las embarazadas que eligen llevar una alimentación limitada o sin alimentos de origen animal, no manifiestan riesgos diferentes a los presentes en omnívoras.

Lic. Mariana Pérez

@mp_nutricionsaludable

mpnutricionsaludable@gmail.com

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